Sunday, September 24, 2006

EL ARTE DE CHUPAR RUEDA (publicado 2005)

A TU RUEDA, SIEMPRE A LA RUEDITA TUYA.

Engancharse a una buena rueda o chupar rueda, es una de las maniobras más polémicas, más rentables y más utilizadas por una gran parte de los pilotos, sobre todo por aquellos que militan en el octavo de litro, una categoría que ahora, con el límite de edad a 27 años, es la categoría de iniciación y de aprendizaje del mundial.

¿EN QUÉ CONSISTE CHUPAR RUEDA?
La maniobra en si es muy sencilla de explicar y los que seguís por la televisión los entrenamientos del 125, y también del 250, la habréis visto poner en práctica en muchas ocasiones. Consiste en esperar, mientras se rueda lentamente por la pista, a que aparezca un piloto que viene rápido, engancharse a su estela y seguirlo a la menor distancia posible, para, de esta manera, poder copiar sus referencias a la hora de apurar las frenadas, trazar las curvas y abrir gas a la salida de los virajes.
Con esta maniobra se pueden conseguir varios objetivos. El primero es que se logra, de una manera cómoda, bajar tiempo en los entrenamientos oficiales, en ocasiones hasta un segundo y medio por vuelta, lo que supone mejorar muchos puestos en la parrilla de salida.
En la mayoría de las ocasiones, el tiempo conseguido así no es un tiempo real, en el sentido de que el piloto no puede hacerlo por si solo y, además, no conseguiría mantener ese ritmo en carrera. Pero ese puesto en la parrilla no se lo quita nadie, ya es suyo y le supone una gran ventaja a la hora de la salida e incluso puede ser una ventaja definitiva de cara a la clasificación final de carrera.
El segundo gran objetivo que puede conseguir un piloto chupando rueda, es acelerar su aprendizaje de una manera casi prodigiosa. Cada piloto más rápido al que uno más lento puede seguir, aunque sólo sea durante unas cuantas curvas, se convierte en un maestro gratuito y sus referencias en una información de gran valor, siempre y cuando el alumno sea capaz de asimilar esa lección de una manera rápida y efectiva. Como es fácil de comprender, de un buen maestro siempre es más fácil y rápido aprender, que haciéndolo de los descubrimientos, aciertos o errores propios.
El último gran objetivo lo consiguen pilotos veteranos, que normalmente no necesitan utilizar esta técnica, porque son capaces de hacer vueltas rápidas por ellos mismos, pero que a veces se atascan en un determinado circuito. En estas ocasiones puntuales, las referencias de algún otro rival pueden llegar a servir para que el piloto confuso sea capaz de ver dónde esta haciéndolo mal, corregir su fallo y continuar con su trabajo de puesta a punto de cara a la carrera.

DIFICULTADES DE ESA TÉCNICA.
Como apuntábamos al principio, chupar rueda es una maniobra sencilla, pero llegar a utilizarla correctamente no es precisamente algo fácil. Para llegar a hacerse una idea de la dificultad que entraña saber sacarle todo su rendimiento, basta con imaginarse el momento en el que más se suele usar esa técnica: últimos cinco minutos de un entrenamiento oficial de 125. En ese momento, un gran porcentaje de los pilotos que circulan por la pista están a la caza de una buena rueda. Esta tiene que ser siempre la de un piloto más rápido. Una vez ha aparecido esa rueda hay que prepararse para el momento más delicado de la maniobra, pasar de rodar lento a rodar al ritmo de un piloto que viene buscando su vuelta rápida y, además, hacerlo a la distancia justa y sin molestarle. Es algo complicadísimo que necesita de mucha precisión para que la maniobra salga perfecta. Cualquier pequeño error puede estropear toda la maniobra, echar al traste el trabajo y obligar al piloto a empezar de nuevo, con el tiempo agotándose y la urgencia de conseguir mejorar su tiempo metiéndole presión.
Otra dificultad es encontrar la rueda buena, que siempre depende del nivel del piloto. Por poner un ejemplo, a Gabor Talmacsi, un piloto que este año esta, como mucho, a medio segundo de la pole, muy pocos rivales le pueden servir de verdad y su elección se verá limitada a los que son igual o mas rápidos que él.
A un piloto que esta a cuatro segundos de la pole, no le sirven todos los que son más rápidos que él. Puede que su moto no sea de las mas rápidas, pero seguramente a le falta mucho por aprender para llegar a ser un buen piloto. Lo mejor que puede hacer entonces es buscar una rueda entre uno y dos segundos más rápida que la suya. Intentar seguir a un piloto cuatro segundos mas rápido, además de ser complicadísimo, puede ser muy peligroso y las posibilidades de cometer errores y que la maniobra acabe en caída son muy elevadas.

¿EL CHUPA-RUEDAS NACE O SE HACE?
Al igual que en otras habilidades que pueden tener unos pilotos si y otros no, por ejemplo, para apurar frenadas, en el paso por curvas rápidas, en el control mental, en el planteamiento de carrera, en valentía, etc, que suelen ser habilidades innatas, el buen chupador de ruedas también tiene que tener algunas cualidades innatas, o lo que es lo mismo, el buen chupa-ruedas nace. Pero aún teniendo facilidad para ello, también necesita ir desarrollando y puliendo esa facilidad durante años. Cosa que normalmente hacen a medida que van subiendo de nivel y de campeonatos a lo largo de su vida deportiva. Esta claro que un piloto que ha usado esa técnica para ir aprendiendo los trucos en cada categoría por la que ha pasado, la conoce bien, la tiene fresca y a punto para ser usada cuando llega al Campeonato del Mundo.

¿CHUPAR RUEDA ES UNA MANIOBRA POLÉMICA?
Efectivamente, esta maniobra siempre levanta polémicas, e incluso puede llegar a verse de distinto modo por la misma persona dependiendo del piloto que la use, en el caso de que ese piloto sea del agrado de la persona que lo ve, le caiga simpático o tenga una relación profesional con él, la maniobra puede ser valorada positivamente y clasificada como un recurso de astucia, picaresca o inteligencia del piloto. En el caso contrario, en la que un piloto mal visto, se aprovecha de las referencias de “nuestro” piloto, su acción se califica de manera muy distinta: es un chupóptero, una ladilla, no tiene vergüenza, sólo sabe hacer los tiempos a rueda de otro… etc.
Los pilotos también tienen sus más y sus menos entre ellos, según sean las circunstancias que rodean a esta maniobra y sus posibles consecuencias. En principio, a un piloto no le molesta demasiado que otro mucho más lento se aproveche de sus referencias, para mejorar su pilotaje o conseguir un buen tiempo. Incluso puede darse el caso de que le facilite la maniobra. Pero esta cooperación, voluntaria o involuntaria, empieza a molestar cuando el piloto que se pone a rueda está cercano en la lista de tiempos y esa molestia se hace insoportable cuando el otro piloto es un rival directo y puede sacarte tu puesto en parrilla, algo que sucede con bastante frecuencia y que los pilotos odian especialmente.
Naturalmente cuando se llega a uno de estos casos, ningún piloto da voluntariamente facilidades a otro para que gracias a sus referencias le pueda quitar el puesto en la parrilla de salida. Más bien todo lo contrario. En estos casos el piloto tiene varios recursos para evitar que el chuparuedas pueda sacar provecho de su trabajo. Cortar gas, rodar más lento o incluso, entrar a boxes, para salir de nuevo a pista, sin llegar a pararse, son algunos de estos recursos. Si además ya lo quiere hacer con mala leche, puede recurrir a darle rueda al otro piloto hasta alguna de las últimas curvas de ese giro, en la que corta gas, entorpeciendo a su perseguidor y estropeándole el tiempo de esa vuelta. Algo que fastidia enormemente al perjudicado y que deja, en el piloto seguido, el agradable sabor de la venganza cumplida. Pero claro, ambos han perdido esa vuelta y la venganza también ha salido cara al más rápido.

TENER MUCHO MORRO AYUDA.
Aun así hay circunstancias en las que no hay recurso al que recurrir para evitar ser un buen rebufo y que el rival se aproveche de nuestras referencias. Ese momento es cuando ya apenas queda tiempo para dar una o dos vueltas. Los pilotos rápidos van a por su vuelta rápida y bajo ninguna circunstancia les interesa cortar gas, meterse a boxes o fastidiarle la vuelta a nadie, como mucho recurren a hacerle señas al chupador de que le pase y le deje en paz. Es ahí donde entra en juego la otra gran habilidad o cualidad innata del chupador de ruedas: tener poca vergüenza y mucho morro, para aguantar su posición sin sonrojarse, esperando descaradamente a que el piloto escogido se decida a tirar, cosa que tarde o temprano tiene que hacer si quiere mejorar su vuelta rápida.

GRANDES CHUPADORES DE RUEDAS QUE HAN LLEGADO LEJOS.
Cada año se puede ver a unos cuantos pilotos de calidad que han usado o usan esta técnica. Toni Elías la convirtió en un arte en su paso por el 125. Llegó incluso a arrebatarle una pole al entonces su mayor rival, Manuel Poggiali, en la última vuelta del entrenamiento oficial del sábado (¿CUÁL?). Esa jugada fue en su momento muy aplaudida por los comentaristas de TVE, que retransmitía esas imágenes en directo y motivo de alegría para muchos de los telespectadores que las veíamos. Pero el enfado de Poggiali fue mayúsculo, como pudimos apreciar en los gestos que le dedicó a Toni nada mas cruzar la línea de meta. La gran progresión de Elías en el Campeonato del Mundo se cimentó, en gran parte, en esa habilidad para engancharse y aprender de pilotos más rápidos, que el piloto de Manresa desarrolló en su paso por distintos campeonatos en los que participó.
Andrea Dovizioso y Mika Kallio también basaron su rápido aprendizaje en el seguimiento de pilotos más rápidos. Durante su primer año en el Mundial su obsesión por chupar ruedas rápidas se podía ver en sus hojas de tiempos, a una o dos vueltas lentas (esperando la llegada de algún piloto rápido), le seguían una o dos vueltas rápidas (las que aguantaban antes de perder las referencias de esos pilotos) y de nuevo a esperar otra rueda aprovechable.
De los pilotos recién llegados esta temporada al Mundial, hay que destacar a Aleix Espargaro. Su excelente inicio de temporada se basa en dos de sus características como piloto: sabe engancharse a ruedas muy bien escogidas, para conseguir situarse mas adelante de lo que realmente le tocaría en la parrilla, y consigue unos inicios de carrera realmente impresionantes, en los que además de unas excelentes salidas, es capaz de adelantar a varios pilotos en la confusión de los primeros compases. En su contra juega el hecho de que para poder mantenerse en esos puestos necesita forzar su ritmo, lo que le lleva a cometer errores que le retrasan. Pero en el fondo eso es lo de menos, lo importante es que esta ahí, peleándose con pilotos con mas experiencia y aprendiendo, a marchas forzadas, de que va esto del Mundial.


NO TODOS SON VENTAJAS.
Aunque dominar esa técnica es algo que supone, de entrada, muchas ventajas para un piloto novel, también tiene sus inconvenientes. Sobre todo cuando el chupar rueda pasa de ser un medio para conseguir un fin, a convertirse en un fin en si mismo. Por ejemplo, un piloto puede chupar rueda para aprender a rodar rápido o directamente chupa rueda para rodar rápido, en este segundo caso, tarde o temprano, se encontrará con alguno de los siguientes problemas: falta de ritmo en carrera, esto le pasará porque no es lo mismo hacer una vuelta rápida, que una carrera rápida. Otro problema será un despiste total cuando no tiene las referencias de un piloto más rápido y también un mayor riesgo de caídas al equivocarse en momentos comprometidos.
Chupar rueda se convierte en un arma de doble filo si el piloto no domina esa técnica, bien porque nunca la ha practicado, algo que suele suceder en pilotos que siempre han sido muy rápidos en todas las categorías por las que han pasado o bien porque no va con su carácter. A este tipo de pilotos, intentar chupar rueda, cosa que solo harán obligados, casi desesperados, por unas circunstancias adversas, la maniobra le supondrá un riesgo extra de caída. Y es que llegar a hacerla bien, supone tener cualidades para ello y muchas horas de dedicación y esfuerzo para desarrollarlas. Nadie, ni siquiera los mejores, pueden improvisar algo así.

CUANDO SE DEJA DE CHUPAR RUEDA.
Un año o dos en el Campeonato del Mundo debía de ser tiempo suficiente para que un piloto de calidad no tenga que recurrir, por lo menos de manera habitual, a buscar la rueda de otros pilotos. Si lo hace es que hay algo que no funciona. Normalmente el tiempo que un piloto necesita usar esa técnica, es solo una etapa en su paso por el Campeonato del Mundo. Por ejemplo, es muy raro ver hacer esa maniobra a los pilotos de MotoGP, la explicación es fácil: en esa categoría ya están los mejores pilotos del mundo, que han llegado a lo más alto, bien a base de un gran talento o bien a base de esfuerzo y experiencia y ya no necesitan referencias de otros pilotos para mejorar sus tiempos por vuelta. Aun así, de vez en cuando, se puede ver casos como el de Hayden en Estoril, esperando descaradamente a que el gran dominador de los entrenamientos, Alex Barros, saliese de su box en busca de su vuelta rápida.

LA OPINION DE ALGUNOS PILOTOS.

HECTOR BARBERA. Cuando llegas a una categoría nueva es un recurso interesante para aprender deprisa. El año pasado en 125cc. yo era uno de los pilotos punteros y eso significaba que cuando en los entrenamientos miraba hacia atrás, casi siempre me encontraba a varios pilotos enganchados en mi rueda. Este año todavía no voy rápido en 250 y en ocasiones lo uso, pero solo en los últimos minutos del entreno si es que no he conseguido ir rápido por mi mismo y estoy el diez o el doce.

JULITO SIMON. Los dos primeros años si lo hacia bastante para coger experiencia, pero este año mucho menos. Cuando me salen los tiempos prefiero ir solo y no me preocupa, pero si no me salen, miro de engancharme a algun piloto rápido, pero esta claro que hacer los tiempos solo tiene mucho mas merito.
La dificultad consiste en ajustar tu ritmo con el suyo de manera que cuando te pasa puedas engancharte. Si ya estas detrás lo que puedes hacer es dejarlo ir unos metros y luego ir a por el. Este año se me enganchan muchos pilotos, no me gusta, pero a veces no te queda otro remedio porque queda poco tiempo.

ALEIX ESPARGARO. Mucha gente me ha dicho que un piloto bueno debe de ser capaz de hacer los tiempos solo, pero yo lo que quiero es aprender rápido y para eso necesito pegarme detrás de alguien. Cuando me situó detrás de un piloto no me cuesta nada seguirlo y rodar a su ritmo, me doy cuenta que haciéndolo así todo me resulta mas fácil. De todas formas también intento rodar solo una buena parte del entrenamiento, aunque si en ese momento me aparece una rueda buena la aprovecho, pero durante ese tiempo no me obsesiono en buscarla, sino que me concentro en intentar ir rápido yo solo. Otra cosa muy diferente es al final del entrenamiento, entonces si que voy a buscar algun piloto al que pegarme. En algunas ocasiones he tenido que echarle mucho morro, meterme detrás de un piloto y ver como me hace señas de que le pase o no le siga, me da igual, yo lo tengo claro, que se meta a boxes si no quiere tenerme a su rueda.

ALVARO BAUTISTA. Prefiero hacer el tiempo por mi mismo y procuro ir siempre solo, aunque en algunas ocasiones viene bien para conseguir un mejor puesto en parrilla, pero no es bueno de cara a la carrera. No me gusta llevar a nadie detrás, si puedo corto y lo dejo pasar, pero a veces, cuando vengo en mi vuelta buena, sigo mi ritmo. Mas que engancharme a una rueda, lo que me gusta es dejar una distancia con el piloto que tengo delante e ir a por el.
PABLO NIETO. Es mejor aprender sin coger rueda y yo procuro ir siempre solo, pero si me encuentro una buena rueda la aprovecho. Te molesta mas o menos dependiendo del piloto que se ponga detrás, en ultimo caso me paro y que tire el. A veces hay tanto tráfico que prefiero perder una vuelta yendo lento y encontrar un hueco para rodar solo.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home